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Tras una de las semanas más complicadas que se recuerdan, con caídas acumuladas del 5%, Wall Street cerró el viernes al alza. Este lunes, las Bolsas europeas recogen el rebote y arrancan la semana decididas al alza, con subidas superiores al 1%. El Ibex ha arrancado ya con un avance del 1,1% y pasado el mediodía crece más del 1,3%, enjugando así la caída del viernes, que lo dejó por debajo de los 9.700 puntos en una semana en la que cedió un 5,6%.
Todos los valores de Ibex, el selectivo de referencia en España, registran subidas. Destacan las empresas energéticas (Endesa, Siemens Gamesa están entre las mejores del índice). También la banca se coloca al principio de la tabla, con alzas superiores al 1%. El selectivo recupera así la cota de los 9.700 puntos que perdió la semana pasada. La marcha de la jornada y probablemente de la sesión de mañana dependerá, como ha ocurrido en las últimas seis sesiones, de lo que pase al otro lado del Atlántico, con la apertura de Wall Street. En sus primeros compases, parece apuntarse a la alegría y abre con una subida del 1,07% en el Dow Jones de Industriales, su principal indicador. El selectivo S&P 500 avanzaba un 0,93% y el índice tecnológico Nasdaq, un 0,91%.
Las Bolsas asiáticas han sido las primeras en retomar la tendencia alcista dejada por Nueva York el viernes y han comenzado la semana con ganancias. Shanghái ha subido un 0,8% y Hong Kong, un 0,7%, por un 0,9% de Seúl. No abrió este lunes el Nikkei.
Europa también recoge el testigo y los parqués repuntan más de un 1%. El conglomerado europeo Eurostoxx 50 sube más del 1,3%. El índice FTSE de Londres gana cerca del 1,15%; el CAC de París, un 1,2%%; el Dax de Fráncfort, un 1,55% y el MIB de Milán, un 0,9%.
En todo caso, la volatilidad vivida la semana pasada, casi desconocida durante todo 2017 en Nueva York, atribuida por los analistas al nuevo atractivo que supone la deuda soberana por su ganancia de rentabilidad, en detrimento de la renta variable, sigue ahí. La recuperación económica es sólida a nivel global, por lo que los bancos centrales se ven presionados o tentados para retirar los estímulos que han asistido a las economías para la salida de la crisis. Se atisban en el horizonte subidas del precio del dinero, parece que la inflación repunta, las acciones de las empresas están en máximos… Son señales que están ahí y que pueden servir de excusa para sacudir los parqués en cualquier momento.
(Fuente: El País – España)
