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TEGUCIGALPA. Varias viviendas en el departamento de Olancho resultaron agrietadas tras el fuerte sismo de 7.8 grados en la escala de Richter que se registró la noche del martes entre Honduras y el mar Caribe.
El sismólogo de Copeco, José Escobar, indicó que normalmente los temblores de magnitud de siete grados que ocurren en el mar son capaces de producir olas de tsunami y por eso cada vez que ocurre ese tipo de sismos se emite alerta verde por un posible tsunami.
La alerta verde por posible tsunami posteriormente fue descartada ya que el sismo de anoche no produjo alerta de tsunami, indicó Escobar quien detalló que el seísmo se produjo a aproximadamente 300 kilómetros de distancia de los poblados, lo que es un trayecto considerable porque entre mayor sea la distancia se dispersa la energía del terremoto y la cantidad de energía que llega a los poblados es mucho menor que si hubiese ocurrido más cercanos a ellos por lo que no se están reportando daños graves.
Respecto al reporte de la retirada del mar de 20 metros en Roatán y 14 metros en Trujillo de la orilla de la playa, el experto explicó que existe una confusión ya que cuando se va a producir un tsunami se tiene la teoría que primero el mar se retira y aunque anoche aparentemente en algunos lugares el mar se retiró, todavía no está claro si fue por otro fenómeno como la marea baja.
Añadió que aunque se retiró la alerta de tsunami se espera que ocurran réplicas muy cercanas al evento principal de una magnitud de entre cuatro y cinco grados que se van a producir durante las próximas semanas.
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Momentos de histeria colectiva
Medios locales de Olancho reportaron que, tras el movimiento telúrico, en varias localidades de ese departamento se vivió una histeria colectiva ya que en esos lugares se sintió el fuerte temblor y luego varias personas publicaron en redes sociales las fisuras y grietas que el sismo causó en sus viviendas.
Mientras tanto, en Trujillo y otros municipios costeros como Santa Fe, Limón y Santa Rosa de Aguán, también la población sintió el fuerte temblor, pero esta mañana solamente se reporta que el mar se retiró de la playa varios metros.
Asimismo, en la zona de Sico y Paulaya y otros sectores del departamento de Gracias a Dios, se reportó que el temblor fue tan fuerte que botó los televisores y otros enseres.
En Roatán se informó que luego de emitirse la alerta de tsunami pobladores de la zona costera de la banda norte de la isla voluntariamente abandonaron sus viviendas y contrataron taxis y otros medios de transporte para trasladarse hasta un lugar más alto ya que esos vecinos también reportaron que vieron que el mar se separó unos 80 pasos o 20 metros de la orilla.
Entretanto, en la ciudad de La Ceiba, Atlántida, no se reportan mayores incidencias solamente el susto que originó el sismo la noche del martes, pero este día todo se desarrolla con normalidad.
Se espera que este día, funcionarios de la Copeco y del Cuerpo de Bomberos, hagan evaluaciones en los lugares donde se sintió más fuerte el temblor para constatar los daños que se pudieran haber producido en algunas viviendas.
